El post va a ser pequeño, como el país...
Liechtenstein es una reducción a lo mínimo de Suiza: montañas, pueblo y río (Rhin). Liechtenstein es sólo Vaduz, y Vaduz es sólo una calle. Un calle en la que se alternan museos y tiendas de lujo, y por la que alternen japoneses y europeos que atravesando europa se dejan caer, por simple curiosidad, por este minúsculo país.
Pero Liechtenstein tiene una cosa que a mí me llamó mucho la atención.. No disfrutando de nada que poder ofrecer a los turistas, ha hecho de su insignificancia un gran negocio..
Imaginaros a todos los filatélicos del mundo.. Seguro que muy pocos tienen amigos en Liechestein. Ahí esta el tema. Su souvenir destacado son los sellos, unos sellos a precios bastante elevados.
En "la calle" no hay árboles, hay sellos y más sellos impresos en el suelo como si fueran las estrellas de la fama de Hollywood.
Y en los sellos está la moraleja del post. Me parece que todos podemos dar valor a algo que tenemos, sólo hay que potenciarlo y saber venderlo. Todos tenemos algo diferencial, todos somos especiales, el problema es que no lo apreciamos porque todos pensamos en unos mismos valores que nos impone el actual sistema de vida.
Todo el mundo a "vender" su rareza!!
Liechtenstein es una reducción a lo mínimo de Suiza: montañas, pueblo y río (Rhin). Liechtenstein es sólo Vaduz, y Vaduz es sólo una calle. Un calle en la que se alternan museos y tiendas de lujo, y por la que alternen japoneses y europeos que atravesando europa se dejan caer, por simple curiosidad, por este minúsculo país.
Pero Liechtenstein tiene una cosa que a mí me llamó mucho la atención.. No disfrutando de nada que poder ofrecer a los turistas, ha hecho de su insignificancia un gran negocio..
Imaginaros a todos los filatélicos del mundo.. Seguro que muy pocos tienen amigos en Liechestein. Ahí esta el tema. Su souvenir destacado son los sellos, unos sellos a precios bastante elevados.
En "la calle" no hay árboles, hay sellos y más sellos impresos en el suelo como si fueran las estrellas de la fama de Hollywood.
Y en los sellos está la moraleja del post. Me parece que todos podemos dar valor a algo que tenemos, sólo hay que potenciarlo y saber venderlo. Todos tenemos algo diferencial, todos somos especiales, el problema es que no lo apreciamos porque todos pensamos en unos mismos valores que nos impone el actual sistema de vida.
Todo el mundo a "vender" su rareza!!
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